miércoles, 8 de abril de 2015

QUE VIENEN LOS FORASTEROS Y SE CUELAN COMO PECES

Se le esperaba desde hace varios años y cuando ya nadie creía que volveríamos a verle llegó para quedarse con nosotros toda la semana. El sol y el buen tiempo han presidido la Semana Santa de Trujillo, permitiéndonos disfrutar de todas las procesiones y de nuestro querido Chíviri, Los hosteleros y comerciantes pueden por fin frotarse las manos estos días en los que Trujillo estuvo de bote en bote.
Para mí hay dos días claves en estas fiestas, uno el Viernes santo en el que salgo junto a mi familia en procesión con el Santo Sepulcro, cofradía a la que pertenezco desde hace más de 30 años y el otro como no, es el Domingo de resurrección y su tradicional Chíviri.



Se puede decir que soy chivirilero o chivirilista o como se diga, soy Trujillano y si hay un día al año en el que me siento más orgulloso de ello es este. llevo disfrutando de esta fiesta toda la vida y espero seguir haciéndolo siempre mientras tenga fuerzas para ello.
Ese día me gusta levantarme pronto, preparar las cosas, comprar el pan ponerme mi chambra, mi gorra y mi pañuelo y subir temprano antes de que empiece la música, pero sobre todo me gusta presumir de pueblo, de tradiciones y sobre todo me gusta transmitírselas a las gentes que vienen de fuera como debe hacer un buen anfitrión, creo que esa es la manera de mantener viva la fiesta. Estos días han estado en mi casa unos amigos de Sevilla, han conocido las fiesta, nuestras canciones y costumbres y se han ido encantados con nuestro Chíviri y con los trujillanos, les he vendido la mejor cara de nuestro pueblo no como otros que son tan necios que solo publicitan la suciedad las peleas o los pequeños contratiempos que generan cualquier fiesta de este tipo. Donde ellos ven suciedad yo antes he visto gente, alegría diversión , dinero para nuestro pueblo y por supuesto hay que limpiar y me gustaría que la gente fuera más limpia, no cuesta nada tirar la basura a los contenedores pero no es un problema de Trujillo, en fiestas como San Fermín, Fallas etc se generan muchos kilos de basura y nadie cuestiona estas fiestas.
Una de las tradiciones que más me gustan es la del jamón de mi amigo Pepín que hace 20 años subió a la plaza un jamón que le habían regalado y desde entonces lleva subiéndolo todos los años y es mucha la gente que pasa por allí a probarlo. El año pasado tuvimos un contratiempo, ya que la policía nos requisó el cuchillo por estar prohibido, pero que alguien me explique como se corta un jamón sin un buen cuchillo así que este año decidimos jugárnosla y subirlo de nuevo, eso sí tuneado para poder camuflarlo mejor.


La fiesta ha ido cambiando con los años, se ven menos refajos y menos pastorcitos que hace años y de ser una fiesta para los trujillanos se ha convertido en una fiesta internacional donde vienen gentes de todas partes pero sigue manteniendo vivo su encanto, se mantienen las canciones tradicionales lejos de ser una verbena y la gente sube la bota de vino, el queso, el chorizo y la patatera y todo se comparte con todo el mundo, se baila, se saluda a gente a la que hace mil años que no se ve y se canta el Trujillo de mis amores como fin de fiesta. Por la tarde antes la gente se iba al campo, ahora nos quedamos de copas por la plaza y alrededores hasta que el cuerpo dice basta. Es fiesta de interés turístico regional y eso implica el que cada vez venga más gente aunque a alguno no les guste mucho y repito somos nosotros los que tenemos que explicarles como va la fiesta y hacerles partícipes de ella respetando las costumbres y nuestro entorno.


Como en cualquier fiesta en la que se reúnen miles de personas también hay una fiesta alternativa creada por la gente joven en la zona de la calle García donde seguramente circulen algunas drogas  y alguna bronca o pelea de gente que nada tiene que ver con nosotros, pero eso es difícil de controlar en cualquier sitio no solo aquí.
Son muchas las críticas que genera esta fiesta en los últimos años, si se ha convertido en un macrobotellón, si somos unos guarros, si es una romería etc etc.....yo a estos les diría con todo respeto que dejen de ver siempre el vaso medio vacío y empiecen a verlo medio lleno que disfruten de este día como lo hacemos la mayoría de los trujillanos que los tiempos cambian y también la forma de divertirse y para mantener vivas nuestras costumbres estamos nosotros y que siempre queda la opción de irse fuera esos días para aquellos que les gusta la tranquilidad y quieren huir de la fiesta. Yo como trujillano seguiré disfrutando de este día como si fuera el último e intentaré que el Chíviri siga vivo por muchos años aunque tenga que irse adaptando a los tiempos que corren y que por supuesto nos vemos en el chíviri 2016, y se me olvidaba un diez a la orquesta este año en especial a José Cigarra.
                   ÑEKE
























 
 



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